Acabamos de comenzar diciembre y se acerca para mi uno de los periodos más bonitos (simbólicamente y estéticamente) del año, y de la rueda del año!. Como os comenté en post anteriores, las brujas dividimos el calendario en ocho Sabbats, ocho periodos en los que está dividido el año en función del ciclo solar-lunar y de la relación sol-tierra. En post anteriores os hablé de Mabon y Samhain, hoy le toca el turno a Yule. Os voy a explicar en qué consiste esta festividad, y subiré próximamente el ritual que he realizado, así como alguna recetas y decoraciones para conmemorar este periodo. Pasaros por mis redes sociales si queréis verlo en formato video 😉
Primero os voy a hablar un poco sobre la rueda del año, ya que hay ciertos conceptos que hay que conocer previamente para poder entender la simbología de este periodo, el porqué de cada cosa, de donde venimos y a donde vamos. Al igual que muchas cosas en la vida, la rueda del año representa un ciclo, de principio a fin: desde el nacimiento, crecimiento, reproducción hasta la muerte. Germinar, florecer, cosechar y morir. Y cuando el ciclo acaba, vuelta a empezar. La rueda del año se utiliza tanto en el mundo wiccano como en otras culturas neopaganas.
La rueda está dividida en ocho periodos, con una duración de seis semanas y media cada una. Los Sabbats son: Samhain, Yule, Imbolc, Ostara, Beltane, Litha, Lammas y Mabon.
Introducción a Yule
El periodo Yule empieza el 21 de diciembre y se alarga hasta el 01 de febrero en el hemisferio norte, mientras que en el hemisferio sur ocurre desde el 21 de junio hasta el 31 de julio. Venimos de Samhain, que culminó con la muerte. Un momento de profunda oscuridad, y mucho frío, y continuamos en la misma línea. Esta época del año coincide con el solsticio de invierno, se produce la noche más larga y el momento más frío del año.
Yule simboliza el momento previo a empezar a renacer. Todos los principios cuestan, son lentos, y lo mismo pasa en Yule. Seguimos sumidos en oscuridad, la naturaleza duerme, se necesita tiempo para despertar. Tiempo para meditar, pensar qué queremos y qué no en este nuevo ciclo. Tiempo de autoaprendizaje, vernos en la profunda sombra y aprender de nosotros mismos, para poder renacer con una nueva versión mejorada de nosotros mismos.
Con el tiempo iremos viendo una pequeña chispa de luz que poco a poco se hará más grande. Nos guiará y nos ayudará a resurgir de nuestras cenizas. Y empezaremos a florecer. Y esto es lo que se celebra en Yule, la esperanza de un renacimiento y crecimiento personal. Hemos visto nuestras ilusiones y esperanzas apagarse poco a poco, y por fin, ese pequeño rayo de luz, ilumina el inicio de un nuevo ciclo, una nueva ilusión acompañada del cambio, tanto interno como externo.
Símbolos principales
En Yule pasa como en Samhain. Los años, la evolución, han hecho que hoy aunque sigan habiendo símbolos originarios de esta festividad y la esencia siga estando, cuando pensamos en este periodo, lo que nos viene a la cabeza es la navidad. La magia siempre ha estado presente en nuestras vidas, aunque no fuéramos conscientes de ello. Y sí, muchos de los símbolos con los que celebramos hoy la navidad de los que ahora hablaremos, originalmente eran utilizados para conmemorar este periodo.
Comenzamos con el elemento principal, el tronco de Yule. El tronco de Yule era un gran tronco que ardía en las chimeneas de las casa, proporcionándoles luz y calor. Este tronco ha ido evolucionando con el paso de los años y ahora lo conocemos como el árbol de navidad. Un abeto repleto de luces y velas, y elementos naturales como piñas y frutos, como forma de simbolizar a la naturaleza, vibrante y llamativo. El simbolismo de ambos elementos sigue siendo el mismo, una forma de iluminar la oscuridad, de dar calidez al hogar. Un lugar en el que reunirse familiares y amigos a celebrar el renacimiento.
Otro de los elementos de esta festividad es la corona, como símbolo del ciclo del año y de las estaciones. Suele colocarse en la entrada principal de los hogares, invitando a la protección. Aunque hay muchos elementos que se pueden poner en la corona, suele decorarse con ramas de pino y piñas, símbolo de la resistencia y persistencia de la vida.
Y por último, mención especial al muérdago, presente en nuestros hogares en esta temporada. Esta planta está rodeada de infinidad de mitos y leyendas, y tiene muchos usos mágicos. El principal uso que se le da en este periodo del año es su poder de protección.
Actividades para Yule
Para mi la mejor actividad de este periodo es decorar la casa, además de hornear unas galletas de jengibre, rodearme de la gente a la que quiero,… así que, vamos a ver qué elementos incorporar en nuestro hogar:
- Como buena bruja, me gusta honrar a la naturaleza y tener distintos elementos naturales en mi hogar. El olor a pino, cedro o canela llenarán tu hogar de calidez, de sensación de bienestar. Son excelentes aromas para esta temporada. Y no te olvides de tus hierbas, las apropiadas para esta temporada son el laurel, roble, salvia, acebo, y el famoso muérdago, aunque hay muchas más que puedes utilizar. Puedes decorar el tronco de Yule con todas estas hierbas y materiales, tendrás un bonito centro de mesa para tus celebraciones 😉
- Si pensamos en qué color le pega a esta época, ¿Cuáles te vienen a la mente? A mi, el primero que me viene siempre es el blanco, recordándome a la nieve, al frio, a la paz, acompañado de tonos verdes y rojos, y destellos plateados y dorados. Así que decora tu casa, tu árbol, tu altar,… con elementos (a poder ser naturales) en estos colores para estar en armonía.
- Si te animas a realizar alguna receta o postre, no olvides ponerles jengibre y canela, son esenciales en esta temporada. Personalmente en esta festividad es la que más atención le pongo a la comida. Siempre que puedo hago galletas de jengibre, un tronco de chocolate simbolizando el tronco de Yule, carrot cake o alguna tarta con frutas de la temporada, y como no, el famoso roscón de Reyes.
- Si realizas algún ritual, ten en cuenta que las piedras o cristales a utilizar en este Sabbat son las esmeraldas, diamantes, rubíes y los granates.
- Si se te olvidó realizar en Samhain un ritual para dejar atrás todo aquello que ya no quieres, y atraer nuevas cosas a tu vida, todavía puedes realizarlo! Escribr todo lo que te propones para el nuevo año, y aquello de lo que quieres deshacerte, medita, haz introspección y conecta con la parte más interna de tu ser.
- En los días festivos como noche buena, navidad,… (o el día que tu celebres esta festividad) es tradición juntarse con familiares y amigos, así que antes de ello aprovecha y realiza una limpieza energética de tu hogar, equilibra las energías para atraer protección, prosperidad y abundancia para ti y tus seres queridos.
Hasta aquí todo lo que tienes que saber sobre Yule y la rueda del año. Próximamente subiré más información de cada uno de ellos, así como rituales y cosas típicas para celebrarlos ;). Si tienes alguna duda sobre los Sabbats, o alguna propuesta o sugerencia sobre algo en lo que quieras ampliar tus conocimientos, ponlo en los comentarios o ponte en contacto conmigo y te ayudaré en todo lo que pueda 😉
Ah! Y no olvides pasarte por mis redes sociales y por otras secciones interesantes de mi web! Poco a poco iré subiendo los rituales que vaya haciendo, más información sobre plantas, hierbas o aceites esenciales, y muchas cosas más!
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